El escándalo de corrupción del FIFAgate sigue su curso, ahora el nombre de la ex presidenta argentina Cristina Kirchner fue el que salió a relucir en este caso.
El ex CEO de Torneos, Alejandro Burzaco devenido en testigo clave del caso, habló este miércoles en un tribunal de Brooklyn. El hombro reveló que su mano derecha, Eladio Rodríguez, encargado de llevar un registro de los pagos, usaba apodos para identificar a los beneficiarios y que los sobornos a los funcionarios K se apuntaban bajo el nombre de su jefa, a quien según, jamás le pagó coimas.
«¿Usted pagó sobornos a Cristina Fernández de Kirchner«, le preguntó a Alejandro Burzaco el fiscal Samuel Nitze. «No, señor», contestó Burzaco, bajo juramento.
El martes, Burzaco confesó que había cancelado 4 millones de dólares en coimas a dos ex funcionarios de la también senadora. Uno de ellos, Paladino. El otro, Delhon, abogado que anteayer se suicidó, sin embargo aún se encuentran investigando las verdaderas causas de su muerte. Burzaco respondió ayer por segundo día consecutivo las preguntas de Nitze, uno de los fiscales encargado de llevar el caso.
En su declaración, dijo que su hermano, Eugenio, actual secretario de Seguridad, le indicó luego de que fue detenido que la policía bonaerense tenía instrucciones de matarlo para que no testificara. «Él supo que instrucciones habían sido dadas a la policía de Buenos Aires, la más grande del país, de callarme para hacer que fuera imposible que dijera cualquier cosa en Estados Unidos, incluso matándome», aseguró Burzaco, casi al final del interrogatorio con lágrimas en su rostro.
Era la segunda vez que le sucedía en el mismo lugar, el estrado de testigos. Antes de que empezara la audiencia, Burzaco también empezó a llorar luego de un gesto de uno de los acusados, Manuel Burga.