En la reciente sesión del Comité Olímpico Internacional se planteó el chance de que, a mediano plazo, Buenos Aires se postule para organizar los Juegos Olímpicos. La meta está puesta en 2032.
«Buenos Aires estaría en condiciones de ser sede de unos notables Juegos Olímpicos», había afirmado el titular del COI, Thomas Bach. «Sé de lo que hablo, porque fui el presidente de la comisión evaluadora de la candidatura de Buenos Aires para ser sede de 2004, y vi un grandioso proyecto en aquellos tiempos, que eran complejos en lo político».
Embarcado en la organización de los Juegos Olímpicos de la Juventud, durante octubre de 2018, el titular del Comité Olímpico Argentino, Gerardo Werthein, no descarta que ese acontecimiento sirva de trampolín para «algo más relevante».
«Creo que es una posibilidad, pero como siempre digo, vayamos paso a paso. Podemos hacer grandes cosas, pero hagamos bien los Juegos de la Juventud, demostrémosle al mundo lo que somos capaces de hacer. Tenemos la capacidad, creo que tenemos vocación con el equipo que llevan adelante el gobierno nacional y el gobierno de la Ciudad, veremos cómo evoluciona todo. Hay muchos proyectos en danza, la Argentina se transformó en un lugar al que todos quieren venir a competir. Podemos hacer grandes cosas», sentenció Werthein.
La elección de la sede de los Juegos 2032 se hará en 2025, dentro de siete años. Los procesos actuales requerían una anticipación de tres años para presentar una candidatura. Juan Antonio Samaranch Salisachs, vicepresidente del COI, confía en que ese periodo puede bajarse a seis meses, pero en las actuales circunstancias todo el proceso está sujeto a revisión.
Aunque falte mucho tiempo para una eventual candidatura porteña, en Buenos Aires será necesario ese poder argumental. «Afuera (en el COI) tenemos todo el apoyo para embarcarnos en el proyecto, adentro (del país) es dónde se producen las resistencias», acepta un alto miembro del staff organizador de Buenos Aires 2018.
